lunes, 13 de agosto de 2012

Turismo en Nepal (Kathmandu).

   Durante una expedición de alpinismo con un grupo de amigos a una gran montaña de este país, visitamos como no la capital de Nepal (Kathmandu).
Lo normal es que te instales en el barrio muy turístico llamado Thamell, aquí hay un ajetreo constante e infinidad de comercios todo ello enfocado al turista, no solo de equipos para trekinq (de los cuales puedes conseguir en alquiler o compra cualquier cosa),
sino de souvenirs de todo tipo.


Diferentes calles de este barrio turístico.






Medio de transporte muy usado.


Típico taxi local.






Mujeres nepalesas esperando al autobús...




Aunque gran parte es peatonal,
en los alrededores se puede transitar con vehículos de motor.






Los vehículos de ruedas se utilizan para muchas cosas.



La venta ambulante es muy utilizada aquí.



Tanto de día como hasta bien entrada la noche.










    No hace falta ir al zoo, en un parque dentro de Kathmandu,
se encuentran muchos monos ladronzuelos, por lo que hay que estar muy atento,
podrían ser hasta peligrosos, si llevas cosas comestibles muy a la vista.







Cerca del río podemos ver los rituales religiosos de cremaciones de personas.


Un personaje muy habitual de ver.















      Aquí conviven todos, mientras por un lado se realizan las cremaciones,
en el lado opuesto se bañan tranquilamente los niños.
 A pesar de que después los restos se vierten el el agua,
en ocasiones  con partes no completamente quemadas.






Diferentes templos donde se realizan ofrendas.


























      Ahora nos desplazaremos a otros barrios mas típicos y menos comerciales,
aunque si turísticos y de gran belleza.



















Estupa muy cercana a Thamell, en una pequeña plaza.











Bodhanath.



















   Centro de la oración en Kathmandu, la Estupa principal donde se dan vueltas y vueltas,
 solo se para de vez en cuando parta tumbarse en el suelo y realizar esas plegarias, que los occidentales y otras culturas, vemos como curiosidades.







De nuevo nos mezclamos entre la gente,
 aunque como extranjeros siempre llamamos la atención.